En el estado de Michoacán, una operación conjunta de las fuerzas federales mexicanas resultó en la muerte de 12 presuntos delincuentes y la detención de nueve más. La operación, llevada a cabo en el poblado de Huitzontla, fue encabezada por la Secretaría de Marina en coordinación con el Gabinete de Seguridad, que incluye la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional, la Fiscalía General de la República y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, con el apoyo del Gobierno de Michoacán.
Durante el enfrentamiento, los elementos de seguridad fueron agredidos con armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, lo que derivó en un confrontación en la que 12 agresores perdieron la vida y tres marinos resultaron heridos.
Los detenidos están presuntamente vinculados con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y se les relaciona con diversos delitos de alto impacto, incluyendo homicidio, extorsión y privación ilegal de la libertad.
En el lugar de la operación, las fuerzas federales aseguraron armamento y equipo táctico, así como otros objetos de interés para la investigación.
Michoacán es una de las regiones más afectadas por la violencia vinculada al crimen organizado en México, y esta operación forma parte de las acciones constantes de las fuerzas de seguridad para desarticular grupos delictivos en la zona.