El número de muertos en la Franja de Gaza debido a los 13 meses de guerra entre Israel y Hamás ha superado los 44,000, informaron este jueves los funcionarios de salud palestinos.

Desde el inicio del conflicto, 44,056 personas han muerto y 104,268 han resultado heridas, según el Ministerio de Salud de Gaza. Se destaca que más de la mitad de las víctimas mortales son mujeres y niños.

La guerra comenzó el 7 de octubre de 2023, cuando militantes liderados por Hamás ingresaron a el sur de Israel, matando a aproximadamente 1,200 personas, principalmente civiles, y secuestrando a otras 250. Actualmente, alrededor de 100 rehenes permanecen en Gaza, de los cuales se cree que al menos un tercio han fallecido.

La ofensiva israelí ha causado una gran destrucción en amplias áreas del territorio costero, lo que ha llevado a muchos a cuestionar cómo y cuándo se podrá reconstruir la región. Alrededor del 90% de la población de 2.3 millones de personas ha sido desplazada, a menudo en múltiples ocasiones, y cientos de miles viven en campamentos de tiendas con escasos suministros de alimentos, agua y servicios básicos.

Israel argumenta que intenta evitar dañar a civiles y culpa a Hamás por sus muertes, ya que los militantes operan en áreas residenciales donde han construido túneles, lanzacohetes y otras infraestructuras militares. Funcionarios palestinos y grupos de derechos humanos acusan a las fuerzas israelíes de cometer crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, y la corte suprema de las Naciones Unidas está considerando alegaciones de genocidio presentadas por Sudáfrica. El gobierno israelí niega categóricamente estas alegaciones, acusando a los críticos de ser sesgados contra ellos.

En las últimas semanas, la cantidad de ayuda humanitaria que entra en Gaza ha disminuido significativamente, lo que ha llevado a Estados Unidos a amenazar con reducir su apoyo militar a Israel antes de retractarse, citando un progreso limitado. Expertos han advertido que el norte aislado y devastado por la guerra de Gaza podría ya estar experimentando hambruna.

Estados Unidos, Egipto y Catar han pasado meses intentando brokerar un acuerdo de alto el fuego en el que Hamás liberaría a los rehenes restantes a cambio del fin de la guerra. Estas conversaciones se detuvieron durante el verano, con Israel y Hamás acusándose mutuamente de hacer demandas inaceptables. El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha prometido poner fin a las guerras en Oriente Medio sin especificar cómo. Su administración anterior brindó un apoyo sin precedentes a Israel y a las políticas de línea dura del primer ministro Benjamin Netanyahu hacia los palestinos.