Este 25 de noviembre, miles de personas salieron a las calles de España para condenar la violencia contra las mujeres y exigir el fin de la violencia machista y la desigualdad. En Madrid, casi 7.000 personas participaron en dos marchas diferentes, según la Delegación de Gobierno. La ministra de Igualdad se unió a una de las protestas.

En lo que va del año, 41 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas en España, sumando un total de 1,286 mujeres asesinadas desde 2003. Un caso reciente incluye el asesinato de una joven de 15 años por su exnovio de 17 años.

Las manifestaciones se llevaron a cabo en varias ciudades, incluyendo Madrid, Valladolid, Barcelona y Sevilla, con diferentes recorridos debido a divisiones dentro del movimiento feminista sobre temas como la ley trans, la prostitución y la ley del solo sí es sí.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, participó en el acto oficial del 25N en el Teatro Pavón de Madrid, donde entregaron los Premios Meninas. Sánchez insistió en la necesidad de «luchar contra la resignación de lo aparentemente inevitable» y mejorar el sistema para prevenir la violencia machista.

Además, se destacó que 61 menores han sido asesinados por violencia vicaria machista desde que existen datos al respecto, y 463 niños y niñas han quedado huérfanos debido a feminicidios desde 2003[1].