Las mujeres en Nuevo León enfrentan una significativa negligencia en las políticas y campañas de salud destinadas a aquellos que viven con VIH.

– **Marginación y Olvido**: Las mujeres han sido consistentemente olvidadas en el diseño de las políticas y campañas de salud, lo que resulta en una falta de atención y apoyo específico para este grupo vulnerable[4][5].

– **Barreras de Acceso**: Las mujeres, especialmente aquellas en zonas rurales o indígenas, enfrentan barreras significativas para acceder a servicios de salud, incluyendo pruebas de detección y tratamiento para el VIH. Estas barreras incluyen bajos índices de alfabetización y marginación política y legal[3][4].

– **Falta de Representación**: Las necesidades y experiencias de las mujeres que viven con VIH no son adecuadamente representadas en las políticas de salud, lo que lleva a una respuesta inadecuada a sus necesidades específicas[4].

– **Impacto en la Salud Pública**: La exclusión de las mujeres de las políticas de respuesta al VIH no solo afecta su salud individual, sino que también tiene implicaciones más amplias en la salud pública, ya que puede contribuir a la propagación del virus y complicar los esfuerzos de prevención y control[4].

Es crucial que las autoridades de salud y los responsables de las políticas públicas reconsideren y ajusten sus estrategias para incluir y apoyar adecuadamente a las mujeres en su respuesta al VIH.